He dejado este fin de semana el blog un poco abandonado. Me congratula saber que a algunos de vosotros ya os ha entrado el mono de post. La verdad es que me he sentado a escrbir un par de veces, pero la ganduleria que normalmente me acompaña a todas partes y que, ultimamente, parecía haberse volatilizado ha vuelto a acompañarme durante el fin de semana.
Os voy a contar una historia real que ha tenido lugar este fin de semana en la residencia de la familia Toayita.
En la madrugada de jueves a viernes, dormía yo placidamente, cuando irrumpió mi hermana en mi habitación cual exhalación:
- Toya, Toya...despierta!!! (esto lo decía mientras me zarandeaba fuertemente, que yo soy de sueño profundo)
- Recórcholis!!! ¿qué pasa? (si eres mayor de 18 años puedes sustituir recórcholis por coño, joder, o cagoenlaputa)
- Levantate ráspido, ráspido que hay un murciélago en mi habitación!!!!!
- Y, ¿Qué quieres que haga yo?.
Mi hermana me tiende un camisón y me dice:
- Vamos a echarlo con esto.
- Menos mal que tienes un camisón de destrucción masiva para estos menesteres. Anda, hazme el favor de dejarme dormir y cerrar la puerta al salir.
Ya sé que está feo no ayudar a una hermana en apuros, pero es que a mi los bichejos me dan mucho miedo y eso ellos lo notan y se crecen ante mi. Habría sido peor. Al final mi hermana armada con su camisón pudo echarlo y dormir más o menos placidamente.
Madrugada de viernes a sabado. Residencia de la familia Toayita. La madre de familia duerme placidamente en su sillón mientras "ve" la tele. De momento abre los ojos y ve sobrevolando por encima de su cabeza una cosa negra.
- Pardiez, otro murciélago!!!
Mi madre, mucho más agresiva que mi hermana no se lo piensa dos veces. Va a la galería, coje la escoba y acude en busca del enemigo.
Tan solo un golpe de escoba despues (eso dice ella y yo debo creerla porque es mi madre) el murciélago cae fulminado.
Mi madre tuvo a bien barrerlo y ponerlo en una bolsa para que sus hijas pudieran verlo al llegar a casa. Yo le agradezco el detalle pero le digo que no habría hecho falta y rehuso mirarlo. Ella insiste, quiere exhibir la pieza que ha cazado. yo lo miro pr no hacerle el feo (me da miedo y asco en cantidades iguales). Mi hermana disfruta de las vistas porque a ella de siempre le ha gustado mucho el gore y sucedaneos.
Ahora por las noches, cuando cierro los ojos veo al murciélago en la bolsa del carreful....cagoento!!!