lunes, noviembre 15, 2004

SIGUE EL CAMINO DE BALDOSAS AMARILLAS

Una de las mejores cosas de no trabajar ya en urgencias maternales es que vuelvo a disponer de los fines de semana libres, porque ya empezaba a pensar que a algunos de mis amigos no los volvería a ver más que en foto.
Este fin de semana, por ejemplo, tenía un cumpleaños de un buen amigo al que no habría podido ir si no fuera por el cambio al que se ha visto sometido mi jornada laboral.
El cumpleaños consistia en una cena-baile-botellón y si tenías suerte restregoncete con algún susodicho o susodicha y si tenías más suerte todavía podías incluso juntar las cosicas de mear con alguien (eso ya en privado que era una fiesta de cumpleaños no una orgia). Debo decir que yo cené, bailé (o por lo menos lo intenté) y bebí (eso lo intente y me salió feten) pero de todo lo demás naranjas de la china.
El cumpleaños era en un campo en una preciosa población alicantina que queda situada exactamente entre la casa de Panete y el mismísimo fin del mundo y donde hacía un frio del carajo (estuvimos incluso tentados de dedicarnos al noble arte de la caza del grajo). Por fortuna una vez dentro del recinto se estaba muy calentito. Había buena música (si, hallofon, de esa que me gusta a mi..tu probablemente te habrías dedicado a la caza del grajo), un DJ muy cachondo, buenos amigos y un montón de gente a la que no conocía absolutamente de nada.
El problema vino a la hora de regresar a casa. 5 coches, 5 y ninguno tenía ni guarra de por donde volver a casa. Yo iba en le coche 2 de copilota, y debido a que mi sentido de la orientacion se mueve en el intervalo que oscila entre cero y menos infinito no tenía grandes esperanzas de servir para mucho. Todo parecía desarrollarse con normalidad, ibamos deshaciendo el camino hecho. De momento un stop...derecha o izquierda??...derecha.....no, izquierda. El coche 1 en el ultimo instante decide variar el sentido tomado inicialmente, el coche 2(usease yo) tiene mucha fe y no tiene ni idea de donde estamos y le sigue, el coche 3 (que no es ni mas ni menos que mi supersister en nuestro picanto) también nos sigue.....de momento observo como el coche 4 (este era un chico que no sabemos muy bien de donde salió)y el coche 5 se van hacia el otro lado. Llamada a mi movil desde el coche 5. Me anuncian que voy camino de Jijona....perfecto, así compramos turrón. Intento hablar con el coche 1 y comunica. Tras varios kilometros camino de Jijona el coche 1 decide parar y variar el rumbo. Por fin llegamos a una rotonda conocida por mi (porque me perdí por allí el otro día) intento explicarles que yo desde allí ya se volver pero sólo confía en mi la conductora del coche que yo copilotaba (no se lo echo en cara dada mi capacidad para perderme hasta por el pasillo de mi casa, pero duele). Al final siguiendo mis indicaciones llegamos a casa.....joder, que falta nos habría hecho el puñetero camino de baldosas amarillas.
PD: debo añadir que el coche en el que iba una servidora estaba apunto de quedarse sin gasolina y yo muchas gasolineras por allí no vi.